La Felicidad después de la Muerte

La semana pasada internaron muy grave a la mamá de una muy buena amiga, eso me ha hecho estar reflexionado y pensando bastante parte de mi tiempo en la muerte y quiero compartirlo con ustedes haber qué opinan.

Sin duda alguna la muerte es una de esas cosas que rompen con nuestra felicidad de golpe y despiadadamente, no sé si llegue un momento en el que estemos preparados para nuestra propia muerte pero definitivamente para la muerte de alguien tan cercano como nuestros padres, hermanos, hijos o pareja es casi imposible sentirse preparado para afrontarlo. Es como si de pronto pusiéramos pausa a nuestra vida, todo se detiene, pasa la muerte y nos deja perplejos con la cabeza vacía, ni idea de qué hacer después y cómo comenzar una vida sin aquella persona. 

Sin embargo, como en toda situación de crisis y dolor, hay una enseñanza, e inesperadamente es mi amiga (quién mencioné al principio) la que me ha enseñado hoy tantas cosas que ¡ni se imagina! Ella y toda su familia son católicos muy creyentes, sobre todo su mamá ha inculcado en ellas la religión y el dar a los que menos tienen, siempre con la frente en alto y un montón de fe en que Dios sabe lo que hace. Así que hoy no fue la excepción, las palabras y acciones de mi amiga estaban llenas de fe, aun tratándose de una pérdida tan dolorosa ella cree firmemente en lo que su madre le enseñó «los tiempos de Dios son perfectos» sigue repitiendo, aunque es indudable que le duele hasta el alma, acepta con resignación que la muerte de su madre tiene un propósito, algo vendrá después de tanto dolor y tanta pena, algún aprendizaje, algún sentido de vida. 

La escuché decir estas palabras no sólo refiriéndose a su madre sino también a una persona que ya se ha hecho amiga, una mujer que tiene a su esposo también en terapia intensiva, un señor de 42 años, con 2 hijos, uno de 12 y una de 8; solo están esperando el momento en que esté él listo para partir. Ella se ve serena, su corazón llorando pero tranquila; entonces mi amiga volvió a sorprenderme «Dios te lo prestó un rato, y ahora es momento de dejarlo ir» sus palabras incluso a mi me pusieron la piel de gallina, pero tenía tanta razón. Nada es nuestro, todo en este mundo es prestado. Y recuerdo entonces también la filosofía budista «this too shall pass…» todo lo que llega, se va. Nada nos pertenece y aceptar esa gran verdad nos libera del sufrimiento. 

Entonces me surgió a la mente alguna frase que escuché por ahí «no llores porque se terminó, sonríe porque sucedió». Difícil forma de ver una pérdida tan grande, pero tan noble el agradecer por haber vivido esos momentos y no enfurecernos por exigir más, de forma egoísta, sin comprender el propósito de la vida en sí misma. Cuando lo pensé ella (la mujer del hospital) comenzó a recordar cómo se conocieron, con lujo de detalle contó desde el primer día que se vieron, como las cosas se fueron acomodando como si el destino hubiera hecho todo un plan para que estuvieran juntos, los ojos se le llenan de lágrimas pero su sonrisa es auténtica, vive del recuerdo y bendice la presencia de él en su vida. 

No pude evitar todo el camino de regreso agradecer por todo lo que tengo, agradecer el tiempo que se me da con las personas que quiero, agradecer cada segundo a su lado y tratar de grabar cada minuto en mi memoria. Gracias por un día más, gracias por una sonrisa, una mirada más. 

La felicidad después de la muerte es muy dura, es aprender a vivir con el dolor y con el vacío, las huellas permanentes que dejan los que se van. La felicidad depende de nosotros, el aprender de esas pérdidas, de ver a los que se van como maestros de vida. Aceptar que la vida no es justa, que la vida es sufrimiento, pero que la vida también es hermosa, llena de momentos alegres, de abrazos, de besos, de palabras de aliento. 

Espero amiga que leas esto, y sepas que también doy las gracias porque Dios te haya puesto en mi camino para enseñarme tantas cosas…

Actividad de Gratitud para niños (de 3 a 99 años)

gratitud

Leyendo Authentic Happiness de Martin Seligman encontré una actividad para fomentar la gratitud y las emociones positivas en los niños que en lo personal me gustó mucho y ya llevo practicando por alrededor de 3 meses. Esta actividad consiste en cada noche antes de dormir preguntar a los niños por 3 cosas que les hayan gustado de ese día, esto fomentará el que puedan recordar los momentos positivos del día y también agradecer esas experiencias. Conforme vayan creciendo esto se volverá un hábito y parte de su rutina de descanso, en lugar de «rumiar» los eventos negativos o los errores que cometimos durante el día, la posibilidad de dormirnos que un sentimiento positivo que nos ayude a dormir mejor y afrontar el siguiente día.

En todo libro que encuentro y leo acerca de la felicidad y la psicología positiva me encuentro con que la gratitud es uno de los elementos principales para potenciar nuestra felicidad y bienestar. Se recomienda llevar un diario de gratitud, en lo personal comencé con este proyecto hace unos 3 meses después de leer la importancia que tiene, pero constantemente olvidaba hacerlo, después encontré una aplicación maravillosa Happier una red social donde todos sus participantes escriben las cosas que los han hecho felices a lo largo del día, tiene la capacidad de subir fotos y dividir tus momentos en categorías, cada vez que escribes un momento Happier te felicita con serpentinas, pero después de agregar tu 3er momento feliz del día tendrás un festejo mucho mayor que te motivará a seguir haciéndolo en días posteriores. Algo que me gusta mucho de esta aplicación es poder leer y ver las fotos de los momentos felices de otras personas alrededor del mundo y corresponder con una sonrisa para la comunidad Happier.

happier

Martin Seligman recomienda que con los niños conforme van creciendo se puede agregar la pregunta de ¿qué esperan bueno que pase al siguiente día? sobre todo después de los 5 años lo que crea un preámbulo para otra actividad: Se le pide a cada niño que forme una imagen en su cabeza de un lugar que les agrade y que sea bonito, se les pide que describan ese lugar (puede ser un parque, una playa, una casa o una recámara) y que intenten ponerle un nombre (La La Land, parcopolis, Buyamún, etc) después se les da la siguiente instrucción:

                 Mientras te quedas dormido (con voz suave) quiero que hagas 3 cosas: 

                Primero que mantengas esa imagen en tu mente

               Segundo que repitas el nombre de ese lugar hasta que te quedes dormido

               Tercero que intentes soñar con ese lugar

Esto promueve el que los niños tengan sueños agradables y también puede utilizarse en adultos con quienes tiene el mismo efecto.

Como sea que practiquemos el hábito de la gratitud es importante volverlo parte de nuestra rutina diaria, no solamente agradecer a otras personas por lo que hacen por nosotros, o por las buenas noticias, sino también agradecer por lo que cada día damos por sentado, el despertar, el comer, el tener salud, el estar rodeado de nuestra familia, etc. En lugar de comparar nuestras vidas o posesiones con las de otras personas que tal si empezamos por agradecer lo que si tenemos lo cual puede hacer un cambio significativo en nuestras vidas.

Matrimonio y Felicidad

pareja

En varios estudios la Psicología Positiva ha descubierto que el matrimonio es un factor que interviene en la felicidad, de forma positiva. Las personas casadas suelen ser más felices que las solteras y divorciadas; aunque el estar en un matrimonio infeliz es más contraproducente  que estar soltero o divorciado.

John Gottman profesor en la Universidad de Washington en Seattle y codirector del Gottman Institute puede predecir si una pareja se quedará casada o se divorciará observando ciertas características de su conducta. El 90% de los matrimonios terminan en divorcio cuando:

  • Los desacuerdos comienzan de forma explosiva.
  • La persona critica constantemente a la pareja en lugar de sólo quejarse.
  • La persona muestra desprecio por la pareja (aunque se de forma no verbal)
  • Ambos se ponen a la defensiva constantemente.
  • No se valida lo que la pareja dice o piensa.
  • Lenguaje no verbal negativo.

Por otro lado Gottman también predice algunas características que pueden hacer que una pareja mejore con los años, y descubre que cuando las parejas dedican 5 horas extras a la semana en su relación de pareja entonces tienen mayor probabilidad de permanecer juntos:

  • Antes que la pareja se vaya en la mañana a trabajar se preguntan uno al otro por las actividades que realizarán ese día.
  • Al final de cada día de trabajo se dan por lo menos 20 minutos para tener una conversación libre de estrés.
  • Se muestran afecto constantemente, abrazándose, besándose, tomándose de la mane, con ternura y capacidad de perdón.
  • Una vez a la semana tienen una cita como pareja, sin nadie más.
  • Se expresan su mutua admiración y aprecio con pequeños detalles.

Además de estas simples acciones que podemos llevar a cabo semanalmente, Martin Seligman propone identificar las fortalezas de nuestra pareja e intentar verlas y apreciarlas todos los días con la finalidad de crear una ilusión de una pareja «ideal» similar a la fase de enamoramiento que nos permite hacer la relación de pareja más estable y más feliz. Las parejas estables logran ver en su pareja virtudes que ni siquiera amigos o familiares logran ver, se enfocan más en las fortalezas que en las debilidades y tienen la creencia que los problemas que tienen otras parejas no podrán ocurrirles a ellos (aunque esto sea una visión optimista y no real).

Seligman afirma, el optimismo ayuda al matrimonio. Cuando tu pareja hace algo que te molesta intenta encontrar una explicación racional de que esa conducta es sólo temporal y producto del momento como «estaba cansado» «tuvo un mal día» etc. en lugar de pensar que es algo permanente como «es insoportable» «es igual de gruñon que su madre» etc. Por el contrario cuando tu pareja hago algo que admiras, que te gusta, piensa que es algo permanente como «es tan inteligente» «nadie es más cariñoso que ella» etc. en lugar de pensar que es algo pasajero producto del momento como «que suertudo» «solo porque es nuestro aniversario» etc.

pareja optimista

Estas son las reglas para un pensamiento optimista como lo he descrito en otros artículos: los eventos negativos son pasajeros y temporales mientras que los eventos positivos son permanentes. Los pesimistas en cambio piensan que los eventos negativos son permanentes y los eventos positivos pasajeros y temporales. La fórmula es sencilla, aplicar el optimismo no sólo a los problemas del día a día sino también a nuestra relación de pareja. Ustedes ¿qué opinan?